La empresa valenciana Icemi ha desarrollado un túnel de inspección capaz de completar en diez segundos la revisión completa de la carrocería de un vehículo para detectar defectos de pintura. Según ha señalado su director general, José Luis Martínez, se trata de "un proyecto totalmente novedoso e innovador que se está exportando a todas las plantas de Ford a nivel mundial". De hecho, ya está instalado en la factoría de la multinacional automovilística en Almussafes (Valencia), en Bélgica y en dos plantas estadounidenses. Icemi, con sede en Almussafes (Valencia), nació en 1982 como empresa familiar y se dedica a la automatización industrial de procesos productivos, para lo que aplica los últimos avances en tecnología y diseño. En concreto, su túnel de inspección se compone básicamente de luminaria y de "entre doce y 16 cámaras", que detectan los defectos de pintura y los proyectan en unos paneles informativos para que los visualicen los operarios que están en una línea de reparación. La novedad del proyecto radica en que "se ejecuta una inspección completa en diez segundos, con lo que prácticamente no hay competencia a nivel mundial porque nadie es capaz de inspeccionar una carrocería con todos sus defectos en cuestión de diez segundos". "Lo más importante es que no se le escapa ni una mota de polvo", subraya Martínez. Junto a esta solución tecnológica, Icemi desarrolla dos proyectos más y tiene otros cuatro en previsión para el año que viene. Según su director general, es una "empresa de referencia a nivel de manutención" en el sector del automóvil, por lo que trabaja en las "plantas más destacadas" de Ford y desarrolla de "proyectos de mucho nivel por su complejidad técnica y por el volumen que manejan. En concreto, se encarga de estas tareas en las factorías de Saarlouis, Genk y Colonia, con proyectos como transportadores de vehículos, algunos ya implantados y otros similares en ejecución.