Afirma José María Aznar a sus más allegados

Redacción

Fue una "visita relámpago" Dice José María Aznar de su estancia en Melilla la pasada semana. El ex presidente que fue muy criticado por el gobierno, porque su paso por la ciudad autónoma no hacía ningún favor a las relaciones con Marruecos.

Aznar ha explicado ha su entorno que fue una visita de lo más normal y que estaba enmarcada dentro de un viaje privado. Lo hizo acompañado con su hijo Alonso, que estaba pasando unos días de vacaciones junto a sus padres en Marbella.

Según fuentes cercanas al ex presidente de las que publica -El Confidencial Digital-José María Aznar asegura en privado que "su intención no era la de montar un escándalo. "Si hubiera querido armar revuelo -admite a sus más allegados- me hubiera parado en la frontera".

Aznar pasó en coche por la zona de puestos fronterizos y se detuvo sólo unos minutos a hablar con un mando de la Guardia Civil que había pedido verle. Después fue a una cafetería céntrica a desayunar y, más tarde, a la sede de la presidencia. En torno a las cuatro, asegura a los suyos, "volví a la Península. Sólo fueron cinco horas".

El ex presidente admite que tampoco quiso llevarse contigo a "ningún miembro de su equipo en FAES". Sólo fue con su hijo y con su personal de seguridad.

Respecto a las críticas que recibió por no haber visitado Melilla durante sus ocho años de mandato, Aznar se defiende, en privado, asegurando que en 2000 estuvo en la ciudad autónoma acompañado, en esa ocasión también, por su hijo Alonso.