Juan Pascual GarcÃa
Después de las revelaciones de El Mundo sobre las actas de la negociación entre la ETA y el gobierno, éste intenta ganarse a la opinión pública mediante dos estrategias. Una es la del elogio de lo realizado. La otra consiste en la legitimización de las negociaciones a través de la tradición. Todos los demás gobiernos habrÃan negociado y entablado conversaciones con los etarras, por lo que el actual gobierno solo seguirÃa una lÃnea ya trazada. Es una justificación similar a la legitimización del GAL. Aquella consistÃa primero en negar la responsabilidad sobre el GAL, para a continuación anunciar que en caso de responsabilidad no hubiera pasado nada ya que en realidad el GAL estaba muy bien. No hemos sido, pero si somos nosotros mejor todavÃa. La actual justificación consiste en decir que hemos sido nosotros pero tampoco pasa nada por negociar ya que las conversaciones con los etarras son buenas y las han llevado a cabo todos los gobiernos. Ambas justificaciones indican mala conciencia o miedo al rechazo de la opinión pública.
Las conversaciones durante los últimos años de los socialistas con la ETA no tienen comparación, que se sepa, con ninguna anterior. Han sido muy prolongadas. Los enviados del gobierno o los lÃderes de los socialistas vascos se han reunido decenas de veces con los enviados de los etarras. Además, los negociadores del gobierno han puesto al Estado español al nivel de la ETA. AsÃ, se llegaba a igualar a las detenciones con los asesinatos. Para el gobierno, el Estado de derecho con todos sus lÃmites y reglas para respetar los derechos de los detenidos serÃa lo mismo que poner una bomba en un coche. Por último, si lo mostrado en las actas publicadas es cierto, no se tratarÃa ya de una negociación para poner fin a la ETA sino de unas conversaciones para alcanzar un pacto. Si el gobierno cambió al fiscal Fungairiño, puso a Rubalcaba en Interior, dio órdenes de detener el menor número de etarras posible, llegó a plantear la financiación de ETA con fondos del Estado y evitó, gracias al chivatazo del bar Faisán, que el aparato de extorsión fuera desmantelado, no se podrÃa hablar de una negociación sino de prácticamente colaboración. Por tanto, las actas, si son ciertas, muestran que el gobierno no quiere que ETA sea realmente derrotada. Más bien revelan el deseo de una izquierda abertzale aliada con los socialistas como ERC lo está en Cataluña. Ponderemos la gravedad de la situación actual comparándola con una situación de guerra entre naciones en la que el gobierno de una ofreciera información sobre movimientos de tropas o cambiase a generales para contentar al enemigo. No se hablarÃa de negociación para llegar a la paz o al armisticio sino de simple traición. El agravante actual radica en que no son dos naciones las que pelean. Aquà de un lado está (o deberÃa estar) un estado de derecho y del otro una banda de asesinos.
Por qué un gobierno, incluso cuando la economÃa funcionaba, desearÃa embarcarse en una negociación, o colaboración más bien, tan arriesgada. Simplemente debido a que el gobierno socialista comparte algunos de los objetivos de la banda. El actual PSOE es el partido del estatuto de Cataluña y del rechazo a la transición. El gobierno es, aunque sea increÃble, antiespañol. Para los socialistas España es un invento, poco menos que fascista, que no tiene base histórica ni constituye nación alguna. España serÃa un error histórico que tan solo provoca enfrentamientos entre pueblos que al parecer sà tienen un fundamento real. Asà que mejor desmembrar España en una serie de repúblicas que no sabrÃamos cómo serÃan excepto que siempre serÃan socialistas.
Mercé
Cuando se sepa la verdad del 11-M el PSOE tendrá que disolverse.
Josep
Zapatero es un ASESINO Y TRAIDOR.
Andrés Galán
El 11-M lo planificaron y ejecutaron el actual Gobierno, ETA y unos confidentes chantajeados por policÃas afines a Rubalcaba, Vera y Barrionuevo. Planificado desde el 2000.
LucÃa Pérez
Pero si lo más curioso es que unos te dicen que no hay negociación y otros te dicen (el propio presidente) que cualquier cosa quediga ETA hay que oÃrla...
Antonio
A mà me hace gracia cuando dicen eso de que:" las fuerzas de seguridad hacen lo posible para luchar contra ETA"...Pero luego este Gobierno hace lo posible para que el trabajo de las fuerzas de seguridad NO SIRVA PARA NADA, porque como ya pasó con el chivatazo de el bar Faisán, las fuerzas de seguridad fueron TRAICIONADAS por El Gobierno.
Alberto
Rubalcaba TRAIDOR.
José RamÃrez
Entonces podrÃa llamarse:Unión de Repúblicas Socialistas...Españolas: URSE!...Mejor que URSE serÃa IRSE...De aquà volando vamos...
Jose RamÃrez
Buen artÃculo...No se puede decir más claro...Quizás más alto sÃ, pero no más claro.
Joana
¿Que por qué se embarca en esa negociación?...¡Porque este Gobierno le debe todo a ETA!.