La Boutique Lladró de Nueva York estrena nueva ubicación en el número 500 de Madison Avenue en un espacio "de estética original y atractiva, que da cabida a la gran variedad de su catálogo, desde las piezas figurativa a las funcional, incluida la reciente apuesta de la compañía por una línea de iluminación". La firma cerámica valenciana ha explicado, a través de un comunicado, que con esta inauguración "pretende desplegar de forma dinámica las colecciones más innovadoras junto a los nuevos clásicos de la marca". Este concepto de boutique, añaden desde la empresa, "responde al espíritu creativo de la familia Lladró, cuya constante inquietud ha sido siempre el motor de la evolución de la marca". Para su diseño, se ha contado con la colaboración del creativo Jaime Hayon, que lo ha dotado de un estilo distintivo en el que predominan el blanco y las formas curvas. A punto de cumplir su 60 aniversario y con presencia en Nueva York desde 1986, Lladró fue una de las primeras empresas españolas con tienda propia en la Gran Manzana, en el emblemático edificio de la calle 57. La nueva ubicación responde al deseo de la marca de emplazarse en el corazón del distrito comercial de la ciudad, donde se beneficia de una mayor visibilidad, y rodeada de marcas que, como Lladró, definen tendencias en arte, moda y diseño.

PROCESO DE EXPANSIÃ"N

Esta apertura se enmarca dentro de "un proceso de expansión de la red de boutiques Lladró, situadas en las mejores zonas comerciales de capitales de todo el mundo", subrayan responsables de la entidad. De hecho, el año 2012 terminará con más de diez nuevas tiendas propias, entre ellas las recientemente inauguradas en Dubai, Estambul y Myanmar.