Emilio Castellote
Debe de ser inquietante sentirse ganador, porque el adversario no da la talla. Debe de ser desolador ganar unas elecciones cuando al adversario le enseña el pueblo tarjeta roja. Debe de hacer pensar al candidato que se siente vencedor en esas circunstancias, que se dejo en el camino de su precaria democracia de partido, digo, que se dejo, a posibles candidatos más apropiados y con un verbo más hiriente, más adecuado, más contundente, más de la misma madera que requerirá la legislatura, nada fácil de gobernar, en la mar que el partido saliente deja, mas embravecida de lo que deberÃa estar.
Siempre estas expectativas de triunfo, han proporcionado sorpresas en pasadas elecciones. Ganar sin despeinarse es difÃcil en un paÃs tan polarizado y sectario como el nuestro. "Que gane mi equipo aunque sea haciendo trampas", ha sido moneda de curso legal en la izquierda, desde 1931.
Recordando la jornada de reflexión después del 11-M, nos damos cuenta de la categorÃa democrática, del partido que puede perder las próximas elecciones después de siete años de desgobierno, asà como de sus compañeros de viaje, con los que harÃan piña sin duda, en caso de necesidad.
Siento la impresión de que algo está preparando el partido que se señala como perdedor, para sacar en última instancia su as de la manga. Pienso que esta vez no tendrá el concurso de la onda expansiva fÃsica y destructora de vidas y trenes. Pero puede destruir unas elecciones limpias comprando voluntades con el humo de una victoria pÃrrica, sobre un terrorismo sin vencer, sin que entregue las armas, sin que se conozcan sus arsenales y salgan estos a la luz pública, sin que todos los componentes de la banda pasen por los juzgados y encerrados cumplan con las penas que correspondan, sin debilidades.
Por otra parte…. en la otra orilla, de nuevo la libreta azul… es lamentable. Ese endiosamiento, ese caudillismo trasnochado, crea tensiones, crea frustraciones y crea descontentos en gentes validas. El the winer is, ya no se lleva ni en el puño de los paraguas de los partidos polÃticos serios. ¿Cuándo perderán los polÃticos celtiberos los gestos autoritarios? Cuando se abrirán a la normalidad democrática, cuando harán campaña electoral, desde el dÃa siguiente a las elecciones, tocando puertas, conociendo, dándose a conocer y convenciendo a sus votantes, para las próximas.
Sera difÃcil atravesar el terreno estepario que ha dejado la mentira gubernamental, la mala administración, la utopÃa, el amiguismo plagado de descontento, de desgana emprendedora, de inseguridad jurÃdica, de penuria económica, de ausencia crediticia, con un horizonte en el que por el momento el arco iris aparece en blanco y negro. Solo destaca el azul de la libreta.
Encarni
Alguien cree que jugaran limpio? Yo no desde luego. Y como Andrs pienso que algo se inventaran para intentar no dejar el sillón del gobierno. Pero a ver si tenemos conocimiento la población y los mandamos a su casa.
Andrés
Siempre lo sacan, o no lo sabemos.Al final sacaran no un As sacaran una baraja trucada y volveran a ganar