Emilio Castellote

Pues va de revisiones. La preocupación por la situación económica, el paro, la desaparición de más de cuatrocientas mil Pymes, la carencia de medidas para combatir este Maremoto travestido de Tsunami, en el que navega España y desgobierna el gobierno Socialista gracias a la excusa de la globalización se ha visto desplazado por la psicosis de la catástrofe nuclear.

Las revisiones de todo tipo que se están planteando para las centrales nucleares en España, basadas en las características sísmicas del Japón , como si aquí esto se pudiera dar esa catástrofe con esa magnitud, deberían venir acompañadas de revisiones a cualquier construcción e infraestructura como puentes , sin olvidar las grandes presas, túneles y rascacielos españoles peninsulares e insulares.

Simular que en España se pudiera dar una catástrofe similar a la de Japón, habría sido como que el Katherine, o sus predecesores, fueran posibles en nuestras latitudes y hubiera desatado histeria semejante, proyectando diques en nuestras costas y edificaciones con resistencia a vientos huracanados mas de 200Km/h y lluvias más que torrenciales.

La actitud del comisario europeo de la energía nuclear, sus manifestaciones, han sido impertinentes juzgándolas con benevolencia. Decir que la situación era apocalíptica, no correspondía al análisis que una autoridad de esa categoría, por el eco que su voz produce.

La realidad es que en plena crisis energética, cuando todos los estudios demuestran que si queremos mantener el nivel de desarrollo que occidente tiene, solo la nuclear nos proporcionaría el precio medio sostenible, para las necesidades crecientes de energía, cargar las tintas sobre su seguridad con supuestos irreales, cuanto menos me parece de falta de sensatez y de madurez de nuestras autoridades.

Debería de tenerse presente la declaración, en caliente, del gobierno japonés cuando ha dicho: que Japón no puede prescindir de la energía nuclear, pues el país retrocedería. Esta es también la realidad para nuestro país, ya muy retrasado y comprando energía cara a Francia, generada en nucleares, pagando además por un costoso almacenamiento de residuos nucleares en suelo francés. Pero sin tener en cuenta, que un accidente nuclear en el sur de Francia nos alcanzaría como si la central estuviera en suelo español. Por otra parte nuestro gobierno al parecer, está financiando nucleares en Marruecos, zona sísmica, las que así mismo en caso de accidente nos alcanzarían sus consecuencias.

Mi impresión general es que esta decisión española está cargada de conveniencias y convicciones partidistas, no preside en ella un espíritu de necesidad nacional presente y futura. Las generaciones venideras que ya están con nosotros, jamás comprenderán la ceguera de las autoridades y la falta de sensatez de sus decisiones.

Ganan los ecologistas, la progresía no el progreso y la conveniencia electoral .Pero estos ecologistas no creo yo que en su casa se alumbren con velas, vayan a caballo, se vistan solo con fibras naturales, reciclen el estiércol de sus caballerías, beban agua de lluvia recogida en sus tejados, tengan gallinas de corral….. etc etc.

Añoro unos gobernantes que fueran capaces de tomar decisiones convenientes para el país y estoy cansado de que seamos el país que siempre mira fuera antes de hacer algo, que nunca toma decisiones en función de lo que nos conviene y siempre basado en lo que otros hacen. Falta la valentía de hacer lo propio y lo que esta adecuado a nuestra cultura costumbres y capacidades. Simplemente veamos dos países que no miran a nadie: uno Japón todo es diferente a occidente, USA todo es diferente al resto y de ambos nos llega todo.