Manuel J. Ibáñez Ferriol
Presidente de la Asoc. Mundo en Acción-ONGD
Un viaje financiado con capital valenciano
Finalizados todos los preparativos, la expedición salió de Palos de la Frontera (Huelva) el 3 de agosto de 1492, con las carabelas La Pinta y La Niña, y con la nao Santa MarÃa con una tripulación de unos 90 hombres. En diversas pinturas y otras obras artÃsticas se ha reflejado la presencia de algún sacerdote o religioso, sin embargo en esta primera expedición no viajó ningún clérigo entre la tripulación. Estuvo en las Islas Canarias hasta el 6 de septiembre, concretamente en La Gomera (visitando a Beatriz de Bobadilla y Ossorio, gobernadora de la isla) y en Gran Canaria, arreglando el timón de La Pinta y sustituyendo sus velas triangulares originales por unas cuadradas, lo que la convirtió en la carabela más rápida de la flotilla.
La expedición no resultó fácil para nadie y durante la misma hubo varios conatos de motines. Entre el 13 y el 17 de septiembre experimentaron el efecto de la declinación magnética. El 22 de septiembre envió Colón su carta de navegación a Pinzón. La noche del 6 al 7 de octubre se produce un intento de motÃn en la Santa MarÃa que fue sofocado con la ayuda de los Pinzón. Sin embargo entre el 9 de octubre y 10 de octubre el descontento se extiende al resto de la expedición, tomando los capitanes la determinación de que se volverÃan en el plazo de 3 dÃas de no divisar tierra. El 12 de octubre, cuando la tripulación ya estaba inquieta por la larga travesÃa sin llegar a ninguna parte, el grumete Rodrigo de Triana dio el famoso grito de: "¡tierra a la vista!".
Sobre este episodio también existe controversia entre los historiadores, ya que los reyes habÃan ofrecido 10.000 maravedÃs al primero que avistara tierra, sin embargo este premio lo recibió Colón quien, según su diario de a bordo, habrÃa visto "lumbre" unas horas antes que Rodrigo de Triana. Llegaron a una isla llamada Guanahani, a la que rebautizó como «San Salvador», en el archipiélago de las Bahamas. También desembarcó en la isla de Cuba y en La Española. En las orillas de ésta, el 25 de diciembre de 1492, se hundió la nao capitana, la Santa MarÃa. Sus restos fueron usados para construir el Fuerte de La Navidad, constituyendo asà el primer asentamiento español en América. Las dos carabelas, al mando de Colón, regresaron a España. En el viaje de regreso sufrieron una fuerte tempestad que hizo que las naves se separasen, llegando la Pinta en primer lugar a Bayona el dÃa 1 de marzo de 1493 y la Niña hizo lo propio llegando el dÃa 4 de marzo a Lisboa.
El dÃa 9 de marzo, Colón se entrevistó con el rey de Portugal para convencerle de que la expedición no interferÃa con sus propiedades atlánticas y después partió para AndalucÃa. Finalmente, el 15 de marzo arribaron al puerto de Palos ambas naves con una diferencia de pocas horas una de otra. A los pocos dÃas falleció MartÃn Alonso Pinzón, el principal socio de Colón en este viaje, que fue enterrado probablemente en La Rábida, según era su voluntad. Se sabe que tanto Pinzón como Colón enviaron noticias de su llegada a los Reyes, que se encontraban en Barcelona. En esta ciudad apareció impresa, probablemente a principios de abril, una carta de Colón anunciando el Descubrimiento dirigida a Luis de Santángel, fechada a 15 de febrero, cuando todavÃa estaban en alta mar. Una semanas más tarde se imprimió en Roma una carta muy similar, dirigida al tesorero Gabriel (o Rafael) Sánchez y traducida al latÃn por Leandro de Cozco. Esta obra se difundió rápidamente por toda Europa y fue traducida al italiano y al alemán. Hasta la publicación del mapa de MartÃn Waldseemüller, en 1507, el territorio americano era conocido como "Indias Occidentales" y, aunque posiblemente Colón no fue el primer explorador europeo de América, puede afirmarse que descubrió un nuevo continente para la civilización europea, al ser el primero en trazar una ruta de ida y vuelta aprovechando las corrientes marinas del Atlántico, ruta que hoy todavÃa se utiliza. El nombre de Cristóbal Colón en italiano es Cristoforo Colombo, y en latÃn Christophorus Columbus. Este antropónimo inspiró el nombre de, al menos, un paÃs, Colombia y dos regiones de Norteamérica: la Columbia Británica en Canadá y el Distrito de Columbia en Estados Unidos. Un encuentro de culturas, que cambio profundamente la concepción que se tenÃa del Mundo conocido.