ANTONIO MANUEL BARRAGÁN LANCHARRO.

El negocio de la Memoria Histórica sigue en boga y parece que el negocio de la propaganda no está en crisis. El pasado 4 de agosto se publicó en el Boletín Oficial del Estado la resolución de la Dirección General de Recursos Humanos, Servicios e Infraestructura del Ministerio de la Presidencia la resolución provisional de las subvenciones con las actividades relacionadas con las víctimas de la guerra civil y del franquismo. El montante final es de 5.681.000 euros. Cerca de 1.000 millones de pesetas para seguir engrasando las peregrinas tesis de la izquierda radical sobre como debía de haber sido la Historia de España si hubieran vencido la Guerra Civil los perdedores. Ésta su principal obsesión, vicio o lo que sea, que sale muy caro, del sudor de los españoles que para eso pagan impuestos. Esto es un ejemplo de los suntuosos dispendios que los socialistas reparten para seguir ahondando en el fraude y en el engaño. Estos datos proceden del Anexo I de la propuesta que está colgada en la web del Ministerio de la Presidencia. La Fundación de Estudios Sindicales de CCOO por el proyecto �La memoria de los abogados antifranquistas andaluces� 22.800 euros. A la asociación Foro por la Memoria Histórica de Málaga y provincia por el proyecto �Las nuevas tecnologías para recuperar la memoria histórica� se le ha de dar 34.200 euros. 24.000 euros van los Documentalistas sin Fronteras Ikuskatu por el �Museo Web de la imagen y la memoria�. La Barranca, Asociación para la preservación de la Memoria Histórica en la Rioja recibirá 29.048,95 euros por un �grupo escultórico mujeres de negro y publicación de unidad didáctica sobre la Barranca�. A Psicología sin Fronteras de Andalucía por la �Oficina de intervención psicosocial en torno a la recuperación de la memoria histórica se le ha otorgado 21.514 euros. La Fundación Pablo Iglesias recibirá 25.965 euros por la �identificación dirigentes socialistas en la clandestinidad�. Y un largo etcétera entre los que se incluyen inhumaciones individuales sumamente costosas que alcanzan la cifra de 40.000 euros. En fin, hasta la imaginación se agudiza en tiempo de crisis para pillar un pellizco de los Presupuestos Generales del Estado. Pero lo grave del asunto es que están imponiendo a base de billetes de 500 euros una visión sesgada de la Guerra Civil. Trabajo le está costando si utilizan tanto dinero para mantener el tenderete.