Valencia Opinión Revista - Noticias de la Comunidad Valenciana y sus pueblos

Los 92 minutos para la historia y el calvario de Aguirre y Camps

David Lozano

Madrid y Valencia por fin están unidos por Alta Velocidad ferroviaria, una excelente noticia que no puede hacernos obviar la realidad de que llega con muchos años de retraso.

Este fin de semana está resultando histórico para Madrid, para la Comunidad Valenciana y para España. Las dos comunidades autónomas que más tiran juntas del PIB nacional y que más contribuyen en el desarrollo y progreso del resto de regiones por fin se unen por alta velocidad ferroviaria.

Este domingo el AVE "pato" inicia su andadura. Una excelente noticia que disfraza otras no tan buenas que se evidencian con una pregunta: ¿por qué se ha tenido que esperar tanto tiempo para que Valencia y Madrid, Madrid y Valencia puedan disfrutar de tan vital y moderna infraestructura? No es tiempo de hacer comparaciones en un momento de satisfacción como este, pero otras ciudades (con mucha menos demanda de pasajeros y peso económico) gozan del AVE en algunos casos desde hace años.

En pocas semanas la realidad, la demanda de pasajeros, el nivel de negocio de esta línea AVE evidenciarán que su llegada, a finales del año 2010, certifica la enorme injusticia del tiempo perdido y del casi insostenible retraso con el que por fin llega a las estaciones de Madrid y Valencia la Alta Velocidad. Los datos hablarán y certificarán como -quizás rememorando aquel calvario vivido hasta poner en marcha la autovía Madrid-Valencia- que se ha perdido un tiempo de oro y que 12 años son excesivos para hacer realidad una obra de progreso tan imprescindible como este concreto. Una docena de años son muchos pero más lo es aún el tiempo transcurrido desde que en 1992 echara a andar el primer tren AVE.

Y entre elocuentes discursos, fotos de rigor, protocolos cargados de boato, codazos para adjudicarse la "autoría" del AVE, autosatisfacción y aplausos entre todo eso no podemos olvidar que Alicante y Castellón siguen viéndolas venir sin fecha concreta para disfrutar también del tren de Alta Velocidad. El caso de Alicante, que podría recibir el AVE en 2012, es todavía más sangrante porque la línea con Madrid es una de la que mayor demanda y tránsito de pasajeros presenta de toda España. En la ciudad de la Plana el "tren pato" no llegará en ningún caso antes del año 2014. Una demora que sufre la economía de ambas provincias y que desgraciadamente seguirán padeciendo.

Habrá que estar vigilantes para que las autoridades, especialmente el ministerio de Fomento, cumpla los plazos que se han establecido y no permitan más insoportables retardos para que el AVE sí sea una realidad en toda la Comunidad Valenciana, un territorio que mira con cierta envidia a su región vecina, Castilla-La Mancha, que tiene todas su capitales de provincia conectadas por la Alta Velocidad. Una responsabilidad de José Luis Rodríguez Zapatero, José Blanco, Esperanza Aguirre, Francisco Camps... y un reto para todos.


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